¡¡Hola a todos gracias por ser parte!!
Hoy me gustaría compartir con ustedes experiencias de la vida, lo que implica vivir en el extranjero, las cosas bonitas, como se siente compartir con otras culturas, y en base a mi experiencia quiero hacer un par de artículos, comenzando en esta ocasión con Argentina.
Uno de los países más grandes del mundo, que te asombra por muchas causas, empezando por sus bellezas naturales las cuales detallaré un poco más adelante, en mi caso fue realmente sorprendente vivir en un país que lo produce todo, sus productos básicos y de primera necesidad, productos secundarios, producen la mejor carne del mundo, un aceite de oliva increíble, aceto balsámico de los dioses, sus helados son un deleite al paladar y de ultimo porque se merece cerrar este párrafo con broche de oro, producen vino, un vino que viene de la última cena directo a tu boca.
Una vez dicho esto que solo recordarlo trae a mi mente tanta felicidad; prosigo hablando un poco sobre su gente y es que son personas tan agradables, tienen ese aire de relajación, con elegancia que su sola presencia da un tono diferente al ambiente, apasionados del futbol y el rugby, los asados y algo con lo cual me deleitaba ante cada conversación su acento al hablar tan particular, años después de haber dejado la Argentina, al hablar con mis amigas por teléfono con solo escuchar ese acento tan bello, se dibuja una sonrisa en mi cara.
Es un país con una marcada arquitectura europea, pero que está renovándose hacia algo muy propio, zonas como Puerto Madero cuyo encanto cosmopolita te atrapa, Palermo, Recoleta, zonas que te hacen sentir una vibra de libertad muy anclada a un pasado lleno de valores y luchas increíbles. Una de las cosas a nivel de sociedad que más me sorprendió, es el papel de la mujer en la sociedad, ellas han luchado mucho por sus derechos y es notorio, ese aire de respeto que se han infundado, es meritorio de todos los elogios.
Hay una parte que me apasiona cada vez que hablo de Argentina, como lo dije al inicio, y son sus bellezas naturales, pero es que debo explicar que la majestuosidad de cada rincón es indescriptible, creo que se necesita un atlas para contener tanta información geográfica maravillosa, por mi parte en mi atlas personal te puede hablar del Glaciar Perito Moreno, El Calafate, por Dios que magnificencia estar frente a el y oír la ruptura de cada pedazo de glaciar que se desprende, y te vibra hasta el último poro de tu piel.
Luego nos vamos del sudoeste de la Patagonia Argentina, a la provincia de Misiones donde nos encontramos con una proximidad tal, que te hace temer ante las fuerzas de la naturaleza con: las Cataratas del Iguazú, me quedo pequeña con el termino temer cuando estas en la Garganta del Diablo y tus cinco sentidos son uno con el agua.
Haciendo un recorrido de extremo a extremo ahora los quiero llevar a las catas de vino más espectaculares que se puedan vivir y esto es la preciosa ciudad de Mendoza, una ciudad adornada por árboles que engalanan todas sus calle de lado y lado y solo puedes pensar que te mueves entre un pasadizo de aire puro y verdor, mientras llegas a deleitar tu ser con el vino Mendocino, hay cientos de bodegas, una más hermosa que la anterior, donde aparte de degustar uno de los mejores Vino tinto Malbec del mundo, te ofrecen visitas guiadas por sus bodegas hermosas, hay propuestas gastronómicas, créanme y todos lo que lo hayan vivido sé que están teniendo una sonrisa cómplice de recordar esta experiencia, pues se convierte en un día que jamás borras de tu mente.
Lo mismo si conoces la colonial y universitaria Córdoba, haces el paseo por el tren fin del mundo en Ushuaia, haces el paseo de los 7 lagos en la provincia de Neuquén o para finalizar quizás con una espectacularidad integral conoces Bariloche, sus montañas para esquiar, pruebas el chocolate delicioso que fabrican y dejas a tus ojos contemplar los paisajes más hermosos desde sus teleféricos.
Y así va Argentina sorprendiéndote, haciéndote pasar momentos gratos, hay muchísimo lugares más que se quedan por fuera, en este breve diario de mi vida que les presento, pero les puedo decir que es un país increíble, fuerte, imponente. Donde viví 3 felices años, conocí médicos con una excelencia profesional absoluta, donde deje amistades que la vida me hará reencontrar cuando así deba ser, pero que siempre están en mi mente y en mi corazón como cada lugar que mis ojos fotografiaron para el banco de recuerdos de mi mente.
